Vector Visual

Noticias y Producción Audiovisual

Opinión

Problemas en elecciones estatales

Maullidos Urbanos
Por Gato de Barrio

gatodebarrio@yahoo.com.mx

La pandemia de coronavirus ya generó conflictos en materia político-electoral. Sucede que los dos únicos procesos para el presente año, para renovar el congreso local en Coahuila –16 diputados de mayoría relativa y 8 de representación proporcional–, y en Hidalgo –renovar 84 ayuntamientos–, originalmente programados para celebrarse el 7 de junio.

            Ante la pandemia por coronavirus, las actividades proselitistas y de organización se suspendieron desde el pasado 1 de abril, al declararse la emergencia nacional sanitaria por parte del Consejo de Salubridad General. Por ello el Instituto Nacional Electoral reprogramó las actividades y fijó como nueva fecha para los comicios el 18 de octubre.

            De esta manera el nuevo Congreso en Coahuila se instalaría el 1 de enero, mientras en Hidalgo, donde deberían entrar en funciones los nuevos ayuntamientos el 5 de septiembre, se propuso el 15 de diciembre como nueva fecha máxima para que los electos asuman sus cargos, mientras tanto el Congreso hidalguense nombraría concejos municipales interinos.

            Sin embargo, tanto autoridades estatales como partidos políticos ponen en duda la factibilidad de cumplirse con el nuevo calendario electoral, ya que en ambas entidades se mantiene en color rojo el semáforo sanitario, es decir continúa el alto el riesgo de contagio de coronavirus, por lo cual sería difícil tanto el desarrollo de actividades proselitistas, como el de la organización del procesos electoral, donde se requiere constante contacto personal.

            Ante ello Omar Fayad, gobernador del estado de Hidalgo, ya expresó su inconformidad con los nuevos plazos, ante el alto riesgo de contagio y ha solicitado que todo el proceso se posponga hasta existir las condiciones sanitarias más propicias; incluso recordó que en los municipios continuarían en funciones con los ya designados concejos municipales interinos.

            Entonces el conflicto es realizar todo el proceso electoral, desde las campañas proselitistas de los candidatos a los diferentes cargos de elección popular, hasta la integración y la organización de todo el proceso, donde participan un gran número de ciudadanos responsables de las casillas, responsables de recibir y contar los sufragios.

            Lo más recomendable sería volver a posponer esas elecciones y empatarlas con todas las demás programadas para el domingo 6 de junio; así en Coahuila se juntarían con las de 38 ayuntamientos y las de Hidalgo con 30 diputados, 18 de mayoría relativa y 12 de representación proporcional. De esa manera se ahorrarían recursos para organizar una sola jornada electoral y es de esperar que para ese entonces ya se haya superado la pandemia.

A %d blogueros les gusta esto: