*Se construyó desde la época de Porfirio Díaz en 1908 en La Magdalena Tenexpan, donde el sitio está cerrado, con daño estructural y apatía de gobiernos municipales.
Temoaya,
México. 8 de octubre de 2019
José Ángel Gutiérrez López
Tras 111 años sin alguna obra de mantenimiento, así como fuertes daños estructurales, el puente Porfirio Díaz de la delegación La Magdalena Tenexpan, en el municipio de Temoaya, se erigió como un peligro para pobladores y automovilistas.

Una visita de Vector Visual al sitio constató que en calle Camino a San Lorenzo Oyamel, sitio del puente, inaugurado durante la larga época de aquel presidente, hay extremos tanto desgajados como fisurados que anticipan un desplome.
Los costados del puente tenían ramas, tierra, escombro y tubos PVC de desecho, que hacían las veces de barreras contra el paso de vehículos de cuatro ruedas, especialmente pesados, que optaban por retornar y tomar vías alternas.
En este lugar circulaban bicicletas y motocicletas, lo mismo que personas a pie, quienes todavía recuerdan que la condición del puente empeoró hace cinco días, cuando un autobús de pasajeros quedó varado en un costado.

“Por aquí pasa la gente cuando va a la escuela, al trabajo y a las actividades de diario en el centro de Temoaya. Nos han dicho las autoridades que puede colapsar en cualquier momento si no se le realizan trabajos de refuerzo”, indicó un morador de la región.
Autoridades del ayuntamiento encabezadas por la alcaldesa, Nelly Brígida Rivera Sánchez, mantenían abandonado el sitio, lo que generó inquietud de moradores, así como de conductores que cortan camino hacia la carretera Centro Ceremonial Otomí.
Un boquete amenazante de un extremo dejaba entrever material pétreo depositado en el fondo del río ahí localizado, donde también estaba derrumbada una estructura con pico tipo mojonera que alguna vez fue parte del puente.
Moradores esperan que el ayuntamiento trabaje en el reforzamiento de la estructura, sobre todo por seguridad de los peatones y por el factor historia, ya que no recibe mantenimiento desde hace 111 años y merece reconstrucción.
(Fotos: José Ángel Gutiérrez)